Artículo enviado por Miguel del Rivero Usón 2º B,
La luz. Refracción y reflexión.
La luz. Refracción y reflexión.
Todos sabemos lo que es la luz, pero es tan
compleja, que es dificilísimo definirla. La ÓPTICA es la parte de la Física que se dedica a su estudio.
La
naturaleza de la luz es tan complicada, que a lo largo de la historia
todos los grandes físicos nos han ayudado a comprenderla un poco más, y aún hoy
seguimos aprendiendo de ella.
Una cosa que todos tenemos claro, sin
meternos en muchos detalles, es que la luz se transmite en línea recta a una tremenda
velocidad, unos 300.00 km por segundo;
esta velocidad se refiere al viajar la luz por el vacío. En un segundo daría
7.500 vueltas completas a la Tierra.
Como todas las materias que se desplazan, su velocidad depende del medio
que atraviesen. Por ejemplo si vamos corriendo y nos caemos en una pista de hielo,
tardaremos un buen espacio hasta que nos frenemos, pues el hielo desliza mucho
por tener muy poco rozamiento; si nos cayéramos corriendo a la misma velocidad
sobre el asfalto, apenas nos deslizaríamos, el rozamiento del asfalto es mucho
mayor, con lo que nos frenamos antes.
Si colocamos dos personas con unos patines en
dos pistas distintas, una muy pulida y otra pista rugosa, les damos un empujón
igual para impulsarlos, el que está en la pista pulida cogerá más velocidad
siendo el impulso igual, esto es porque en cada medio, en este caso las pistas, la velocidad con la que se desplazan los patinadores es distinta, a esta
particularidad le vamos a llamar índice de rugosidad, que es el motivo, como ya hemos dicho, de
que la velocidad sea diferente de un medio a otro. Os preguntareis y ¿qué tiene
eso que ver con la luz? pues la luz, como todo lo que se mueve, se desplaza a distinta velocidad
según el medio que atraviesa. A esta característica única de permitir
cruzarlo a una determinada velocidad, en el caso de la luz se llama índice de refracción. En el cuadro
de abajo, se ven los índices de refracción de distintos materiales. Si os
fijáis, veréis que es muy parecida la velocidad del vacío (el espacio) a la del
aire (la atmósfera), a esta se le ha dado un valor de 1. A mayor índice de refracción la
luz se frena más y la velocidad será menor. Veréis que la luz viaja más deprisa en el
hielo que en el agua.
MATERIAL
|
VELOCIDAD
|
INDICE DE REFRACCIÓN
|
Vacío
|
299.792 km/s
|
1
|
Aire
|
299.706 km/s
|
1,00029
|
Hielo
|
228.849 km/s
|
1,31
|
Agua
|
224.844 km/s
|
1,333
|
Cuarzo
|
194.166 km/s
|
1,544
|
Diamante
|
124.035 km/s
|
2,417
|
Cuando la luz pasa de un medio a otro, cambia la
velocidad a la que se desplaza, acordaos que de ir por el aire con un índice de
refracción 1 pasa al agua con 1,333 de índice de refracción, por lo que la luz
se frena, eso hace que según donde lo miremos, la imagen la veamos distinta.
Al cambiar de medio (paso de aire a agua), una
parte de los rayos que llegan al mismo cruzan, como vemos en el vaso, a lo que
llamamos refracción (la que atraviesa) y otra parte
de los rayos no pasa del primer medio al
otro, como la montaña sobre el lago, que denominamos reflexión (no la atraviesa, se refleja). La suma de lo
que refracta más lo que se refracciona, es igual a la luz que llega.
Refracción
Reflexión
Muchos
habréis jugado a lanzar piedras paralela y a ras del agua en algún estanque o
río de aguas tranquilas con la intención de que las piedras reboten una o
varias veces antes de entrar en el agua. Los rebotes al tocar el agua sería la
reflexión y cuando por fin entra, la refracción.
Cuanto más paralelo seamos capaces de
lanzarlas, más rebotan. Si la lanzamos desde arriba y sobre todo si es
perpendicular, es imposible que rebote. Con la luz pasa lo mismo, cuanto más
paralelo cambia de medio, más queda fuera (reflexión) y cuanto más
perpendicular más entra (refracción), de tal manera que si incide totalmente
perpendicular, toda la luz se refracta (cruza) y si llegara paralela, toda se
reflejará (no cruza).
Rebote
(reflexión) de una piedra
Vamos a seguir con el símil de los
patinadores y la pista de hielo…
Como bien sabéis, si vas patinando recto y se
te frena un patín, por ejemplo el izquierdo, el cuerpo girará hacía el lado que
se ha frenado, en este caso a la izquierda.
Vamos a ver que le ocurre a un patinador
(representado por cuatro círculos blancos en la imagen de abajo) al cambiar de
pista de patinaje, desde una de índice bajo
(muy rápida) a otra de índice alto (muy lenta). Como veis en el dibujo,
al pasar de la rápida a la lenta, llegarán antes las ruedas de la izquierda,
con lo que involuntariamente se torcerá hacía la izquierda. Una vez que todas las ruedas
estén en la pista lenta, dejará de girar, volverá a ir recto pero con una nueva
trayectoria.
Este concepto en óptica es muy útil, pues podemos cambiar la dirección de los
rayos de luz a donde nos interese llevarlos, siempre que sepamos a la velocidad
que se desplaza la luz, en el aire (índice de refracción = 1) y en el nuevo
medio (el índice de refracción de la lente que usemos). Al cambiar la forma
(como se ve en el dibujo) que separe ambos medios conseguiremos obtener los
efectos deseados: Aumentar, disminuir, invertir, deformar, desplazar e inclinar
en cualquier sentido. Con todo esto no solo se pueden corregir los defectos visuales
del ojo, nos permite también componer sistemas ópticos complejos: microscopios, telescopios, mandos a distancia,
microondas, radiografías, …
Y si quieres saber más sobre las lentes los defectos de visión….tendrás
que esperar al próximo capítulo….
Fuente: D. Alfredo del Rivero. Diplomado en Óptica y Optometría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario