Noticia enviada por Mª José Buendía, 2º B
Algunas enfermedades resultan estéticas y no tan malas
como en general se piensa: este es el caso de la heterocromía: una anomalía de
los ojos en la que los iris son de diferente color, total o parcialmente.
La heterocromía se presenta con poca frecuencia y puede
tener causas congénitas (presente desde el nacimiento) o adquirida.
Hay solamente una forma de heterocromía
congénita que aparece sin problemas asociados. Esta puede tratarse de un carácter hereditario. La otra forma en la
que puede aparecer es de forma espontánea, sin ninguna razón hereditaria
detrás. Se produce por una alteración en la expresión de los genes involucrados
en el color de los ojos.
La heterocromía
adquirida es más frecuente y la lista de causas que pueden
provocarla es aún mayor que la congénita. Entre toda la variedad que hay
destacan:
-Siderosis y Hemosiderosis. En ambos se produce depósitos de
hierro en los tejidos del ojo, alterando el color.
-Ciclitis heterocrómica de Fuch: Es una inflamación crónica de
la cámara anterior del ojo (entre el iris y la córnea).
-Colirios. Hay una gran cantidad de gotas para los ojos que
pueden cambiar el color. Claro que los resultados no son predecibles.
-Melanomas. Tumores que consisten en una proliferación excesiva
de melanocitos, las células encargadas de sintetizar la melanina. Además de las
causas anteriores, que son las más frecuentes, existen otras enfermedades más
raras que pueden causar heterocromía.
Ici vous pouvez trouver quelques
informations sur l’hétérochromie mais en français:
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